Shop Talk, La entrevista de Will Eisner a Jack Kirby (Parte III)

Los tema en esta parte son: El Capitán America, Joe Simon, el romance y el joven Stan Lee

Antes:

Mes de Jack Kirby: Shop Talk, La entrevista de Will Eisner a Jack Kirby (Parte I)
Mes de Jack Kirby: Shop Talk, La entrevista de Will Eisner a Jack Kirby (Parte II)

Les recomiendo leer tres entradas en Ferran Delago´s Blog relacionados a Kirby:

- Collage de Jack Kirby utilizando fotos del Playboy
- Nota necrológica de Jack Kirby en el NY Times
- Preview de The Thin Black Line, el controvertido libro sobre Vince Colleta

En el libro (escaneado) no hay crédito al traductor, si alguien sabe avise. Esta entrevista que estoy pasando al blog y que consta de varias partes fue hecha en el año 1982 en medio de la convención de cómics en San Diego. Se publicó como "Conversaciones con Will Eisner - Shop Talk" por Dark Horse en su versión original y por Norma en su versión para el idioma español Seguimos....

Eisner: ¿Me estás diciendo que la diferencia entre el Jack Kirby que vivía en la zona este de Nueva Cork y el de hoy en día es que el actual es conocido y el otro? No lo entiendo.

Kirby: Lo que te digo es que hoy en día conozco a la gente lo suficiente como para recibir una repuesta de cualquiera, pero en aquella época, cuando era más pequeño, todo el mundo pasaba de mí.

Eisner: Entonces lo que haces es actuar. ¿Dirías que actúas? Corrígeme si no estás de acuerdo.

Kirby: No, estoy de acuerdo. Creo que todos actuamos. Los empresarios actúan porque son maquinadores, y su trabajo consiste en maquinar. Quieren conseguir el puesto de ejecutivo que les interesa a toda costa, y se lo van a quitar de forma sutil a quien lo posee.

Eisner: Defíneme “actuar” ¿Es el hecho de dibujar? ¿Dónde reside la actuación en tu caso?

Kirby: En mi caso reside en la sinceridad, en buscar el elemento que hará que alguien me responda. Normalmente trabajo con temas de ciencia ficción, aunque a veces me han asignado otros temas. Recuerdo que Joe y yo fuimos los primeros en crear revistas de cómic romántico.

Eisner: Cierto. Joe Simon y tú trabajaron en una línea romántica.

Kirby: Por aquella época trabajamos para McFadden Publications. MacFadden tenía una línea de cómics, y en uno de los títulos creamos una serie llamada “My Date”. De repente se me ocurrió que McFadden era el mayor proveedor de literatura romántica del mundo y de que ganaba millones con ello, y que ambos trabajábamos en lo mismo. Pero no había historias de amor en el cómic.”My Date” fue el preludio.

Eisner: Fue el primero, si no me falla la memoria.

Kirby: Los primeros cómics románticos provienen de aquella discusión. Las ideas surgen de las discusiones, y allí estábamos nosotros, sentados sobre uno de los cimientos de la narración. En aquella época los géneros con más éxito eran el criminal, los westerns y los romances.

Eisner: Bueno en aquella serie, y esto es muy importante, ¿Qué hacías tú y que hacía Joe?

Kirby: Vale, Joe me llevaba de la manita.

Eisner: ¿Quién escribía el guión, Joe o tú, o lo escribían juntos?

Kirby: A veces juntos, pero casi siempre lo escribía yo.

Eisner: ¿Los diálogos también?

Kirby: Guión y diálogo.

Eisner: Entonces no era Joe, sino tú quien escribía la mayoría de los guiones. A Joe no se le daba tan bien.

Kirby: Joe se dedicaba a relaciones con los editores. Él medía 1,90 y 1,62. (Ríe) Los editores ni me miraban, aunque yo no me lo tomaba a mal. Sabía que no me tomarían en serio. Joe era muy visible con su metro noventa, y además había sido reportero del Syracuse Journal. Yo le admiraba muchísimo. Le admiraba por haber pasado por la facultad y por provenir de lo que yo pensaba que era una familia de clase media. Era un animal completamente diferente, y era mi modelo a seguir para cambiar mi carácter.

(Nota: Hace varios dias Joe Simon cumplió 97 años acá un video vía Entrecomics)



Eisner: Un paralelismo muy interesante, salvo que en mi sociedad con Jerry Iger los papeles estaban cambiados. La razón por la que me asocié con Jerry fue porque era un buen negociante y yo era tímido, aunque se me daba bien preparar los productos y dirigir el estudio. Jerry no dudaba ni un momento en llamar a un editor. Eso sí, él era bajito, pero era muy animado. Era trece años mayor que yo.

Kirby: Tenía la perspicacia necesaria para los negocios. Sabía hacer las cosas para conseguir lo que deseaba.

Eisner: Sí, sabía conseguir clientes. Volvamos a los cómics románticos. Tú escribías y Joe los vendía. Pero Joe también dibujaba un poco.

Kirby: Era muy buen dibujante, y uno de los mejores rotulistas que he visto. Hizo algunos de los mejores anuncios de toda la historia.

Eisner: Aún trabaja en publicidad.

Kirby: Para mí será el mejor, porque es un profesional muy competente.

Eisner: Intenta explicarme paso a paso la historia de los cómics románticos.

Kirby: De acuerdo. Joe y yo empezamos a desarrollar la idea juntos.

Eisner: Entonces comentaban ideas, como por ejemplo: “Vamos a hacer una historia que sea así: chico conoce chica, chica conoce chico…”

Kirby: No necesariamente. Yo le decía: “Vamos a hacer una historia sobre eso”, y a él le daba igual qué tipo de historia fuese. A Joe lo que le importaba era conseguir un buen producto. Sabía que yo podía escribirlo y creo que él sabía por instinto que su función era mantener buenas relaciones con los editores. Conocía bien a Martin Goodman y a todos los editores del ramo. Cuando llegué a Fox, Joe era coordinador, y era un puesto al que yo no podía aspirar.

Eisner: Entonces hablaban sobre el guión y luego tú empezabas a escribirlo. También hacías los bocadillos y escribías los diálogos.

Kirby: Creo que tengo un don natural para escribir guiones dramáticos y de humor. Escribo sátiras. Imito como los monos.

Eisner: ¿Qué hacían para elaborar el material? ¿Tú dibujabas a lápiz y Joe entintaba?

Kirby: Sí, Joe entintaba y rotulaba.

Eisner: ¡Eso es lo que te enseñé cuando estabas en Eisner & Iger! (Risas)

Kirby: Es lo que he hecho siempre desde entonces.

Eisner: Era algo que me preguntaba a mí mismo, si seguirían haciéndolo o no. (Risas)

Kirby: Nunca me aparto de un modelo. Funciona con todo el mundo. Creo que es ahí donde empieza todo.

Eisner: De hecho, cambió más tarde cuando estabas con Marvel y Stan Lee, pero ya hablaremos de eso después. Quiero hacerme una idea de esa operación. Preparabas un boceto de la acción, luego los bocadillos y más tarde empezabas el trabajo a lápiz. Recuerdo que tus lápices eran bastantes definidos. Al menos en mi taller eran lo suficientemente definidos como para cualquier persona habilidosa pudiera entintarlo.

Kirby: Mis lápices eran minuciosos.

Eisner: Bien. Después Joe entintaba.

Kirby: Exacto.

Eisner: Y para no perder el ritmo, ibas preparando a lápiz otro guión mientras él entintaba el primero supongo.

Kirby: ¡Exacto! Y así trabajábamos muy rápido. Una vez, cuando trabajábamos para DC, nos enviaron un guión y lo hicimos al vuelo.

Eisner: ¿De verdad? ¡Qué bueno!

Kirby: Eso no nos hizo ganar amigos, pero esa misma tarde ya habíamos acabado con el guión. Se nos empezó a conocer como los hombres más rápidos del ramo porque sabíamos cómo preparara el producto más rápido que nadie.

Eisner: Hace poco estuve hablando con Joe Simon sobre eso mismo en una entrevista. Hay muy pocas parejas como ustedes dos. Por supuesto, Siegel y Shuster, pero el otro par clásico que me viene a la mente son Joe y tú. Son parte de la historia del mundo del cómic. Aunque es muy fácil decir algo así, porque incluso el botones de mi finca dice que es parte de la historia del transporte… (Risa) No lo digo para quitarte importancia…

Kirby: No, yo no le quito importancia nadie. De hecho, admiro a la gente corriente.

Eisner: Bueno, volvamos a lo nuestro, que no quiero perder el hilo. La sociedad se convirtió en un equipo que tuvo gran impacto en el campo. Durante este proceso, realizaron un producto que tenía identidad propia.

Kirby: Sí, tenía un estilo distintivo.

Eisner: Entonces, eras consciente de la identidad o carácter propio del producto de sus esfuerzos conjuntos. Sé que es difícil verse a uno mismo en perspectiva, pero si lo comparas con el trabajo de nuestros contemporáneos verás las pruebas.

Kirby: Tienes razón.

Eisner: ¿Crees que Joe cambió su estilo de dibujo para acomodarse a tu trabajo a lápiz, o alguna vez observaste que hiciese cambios en tus lápices para ajustarlo a su habilidad?

Kirby: Joe nunca tuvo tiempo para hacer cambios. Era como un sastre.

Eisner: La verdad es que en aquella época éramos como fábricas.

Kirby: Éramos fábricas y trabajábamos a destajo porque había que publicar cómics rápida y continuamente. Se vendían muy bien, especialmente los nuestros.

Eisner: Según Joe, ustedes eran los número dos o tres del campo

Kirby: Desde luego, cuando aparecieron los superhéroes. Nuestros primeros superhéroes eran míticos.

Eisner: ¿Cuál fue tu primer superhéroe?

Kirby: El Capitán América.

Eisner: ¿Ya para quien lo hiciste?

Kirby: Para Atlas, de Marin Goodman.

Eisner: Marin Goodman. ¿El famoso Marin Goodman?

Kirby: Sí, Alas aún no se había convertido en Marvel. Stan Lee ni siquiera había aparecido en escena. Llegó después, era un chaval joven. Me acuerdo de que se sentaba en mi escritorio, se ponía a tocar la flauta y no me dejaba trabajar.

Eisner: ¿De verdad? Joe Simon dijo que lo contrató cuando era un crío.

Kirby: Sí, en la oficina aún era un crío. Recuerdo que yo me tomaba muy en serio mi trabajo, pero él no se tomaba en serio nada. No creo que sea nada malo, todos los jóvenes hacen lo mismo.

Eisner: Volvamos al Capitán América. Otra vez la misma formula y modus operandi. Tú escribías y Joe entintaba, te apoyaba y hacía los rótulos. ¿Alguna vez trabajó él a lápiz y tu entintaste su trabajo?

Kirby: No, nunca.

Eisner: Vale, simplemente quería asegurarme.

Kirby: Yo entintaba esporádicamente. Lo hacía cuando pensaba que era necesario. Joe nunca me lo impidió. A veces puede que no estuviese lo suficientemente detallado. Me parecía que el de extensión doble tenía que quedar más impactante, más duro, para que yo pudiera entintar encima de lo que ya tenía. Joe me dejó intentarlo y fue muy efectivo.

Eisner: La relación era más una asociación comercial que una asociación literaria, ¿no?

Kirby: Exacto.

Eisner: No había mucha reflexión intelectual ni introspección en los que hacían.

Kirby: no podía haberla, porque normalmente Joe no se habría relacionado con alguien como yo, y yo no encontraba a nadie con quien relacionarme. (Risa) era exactamente así. De verdad, si yo midiese metro noventa nunca me juntaría con una chaval de la calle que medía metro sesenta. Y si estuviese en sexto curso, nunca me juntaría con un chaval que estuviese en segundo.

Eisner: Me alegro de que no seas mi hermano mayor, porque habrías sido un hermano muy difícil. Seguro que siempre te hubieses burlado de mí. (Risa)

Kirby: Sea como sea, encontramos en el otro algo que necesitábamos, y creo que era genial.

Eisner: Joe me contó que en Long Island vivían muy cerca.

Kirby: Ah, bueno, la verdad es que estoy hablando del principio. Más tarde nos acercamos más. Empecé a pensar por mí mismo ya analizar no sólo las relaciones, sino los productos e incluso a mí mismo.

Eisner: Ésa es una parte importante de lo que intentaba demostrar cuando hablaba del “intercambio intelectual”. Iger y yo teníamos muy poco. Teníamos edades y filosofías de vida distintas; incluso nuestros objetivos eran diferentes. ¡Él sólo pensaba en el negocio! No había posibilidad alguna de intelectualizar. Más tarde cuando llearon dibujantes al taller, como por ejemplo Lou Fine, ya no podía analizar intelectualmente la situación un poco más. Él era mi colega y podíamos hablar. De ahí viene la especie de expansión mental que aparece últimamente en mi obra. Es una especie de aportación al producto desde sensibilidades elevadas. Intentas mostrarte como un tipo duro, Jack, pero me parece… puede que dentro tengas un chico dulce que intenta salir. (Risa)

Kirby: Era un tipo duro. Podría haber sido por el mal camino cuando era joven. Creo que lo que me hizo cambiar fue un amigo mío al que le dispararon. Su padre comenzó a jugarse el sueldo semanal, y su madre se hundió. Vi como se tiró del tejado.

Eisner: (Gruñido) Vaya es horrible. Esas cosas dejan huella. Volvamos a tu trabajo en el Capitán América y la misma fórmula de antes, que sigues utilizando. Tú escribías y hacías el trabajo a lápiz, y Joe entintaba, rotulaba y llevaba las relaciones con los clientes.

Kirby: Sí, pero de lo que no nos habíamos dado cuenta es que estábamos haciendo una versión moderna del Tío Sam. Ya no vestía levita ni llevaba barba. Ahora era un superacróbata que podía apañárselas contra diez tíos, que era algo con lo que siempre había fantaseado. Digamos que yo ya no era luchador callejero, sino un coreógrafo.

Eisner: Gil Kane lo llama “violencia lírica” ¿Estás de acuerdo?

Kirby: Sí, me parece violencia lírica. Creo que hay belleza en la violencia, aunque por supuesto también hay fealdad. He practicado boxeo toda mi visa, y nunca he jugado sucio. Intento luchar y ganar limpiamente.

Eisner: Cuando tus héroes luchan, lo hacen a tu manera ¿no?

Kirby: Sí, Yo pensaba que si tenía que luchar contra diez tíos, encontraría una forma de hacerlo.

Eisner: Quiero volver al tema de las página. ¿Eras consciente de la composición de las páginas? ¿Desarrollaste alguna fórmula o teoría en aquella época? Es que por entonces tu material empezó a ser muy diferente. En mi taller hacíamos las composiciones de páginas según la tendencia del guión, pero aquí tu hablas de violencia y acción.

Kirby: De repente empecé a intelectualizar.

Eisner: Bien.

(Continuará)

No hay comentarios:

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...